El primer cuatrimestre acabó, y con él, el taller del Área de Escultura del segundo curso. Desde el taller se hicieron diferentes propuestas, que pretenden relacionar los planteamientos escultóricos con las técnicas y procesos cerámicos: los estudios de los pliegues de las bolsas de papel, trabajos constructivistas que nacían del cilindro como elemento familiar en el lenguaje cerámico, inspirarnos en la obra de Doménico Gnoli, o el retrato. Entre medias se cruzo María, una modelo fantástica, con la que nos enfrentamos a la realidad del desnudo, el curso se enriqueció, no se pudieron cumplir todos los objetivos, pero no importó, surgieron otros.
También se realizaron diferentes estudios de engobes y barnices para poder completar el trabajo de color y calidades para aplicar a las obras cerámicas, trabajo dirigido por Alicia Cañero.
Ya solo falta hablar del grupo, fantásticos, todos diferentes pero fantásticos, tienen una cosa en común, piensan que la obra es mas emocionante cuando en ella se manifiesta su propia opinión, yo también estoy acuerdo.
"El deber del artista es prestar atención a las insinuaciones y confiar en los sentimientos e instintos propios" Will Gompertz.
Bs para todos.
